Si bien hemos escuchado varias veces, que orinar mientras nos duchamos tiene beneficios, algunos expertos dicen que no es muy positivo.
El tema de orinar o no en la ducha, se ha vuelto controversial, entre los conservacionistas del agua, del medio ambiente y los especialistas en salud. Cada vez que descargamos el inodoro son casi 16 litros de agua que se desperdician, y cada vez que orinamos en la ducha son varios los problemas que pueden afectar nuestra salud.
Por ejemplo:
Cada vez que te laves las manos, laves los platos, etc., estás creando una asociación en tu cerebro entre el sonido del agua corriendo y tener que orinar, lo mismo sucede cuando orinas en la ducha, haciendo así que tu vejiga libere la orina al escuchar este sonido.
Orinar requiere de una posición cómoda, para que se relaje el esfínter de la vejiga y los músculos del suelo pélvico, simultáneamente, la vejiga se contrae y se vacía.
Por lo que no es normal tener que forzar la salida de orine, la postura que se adopta al momento de orinar parada en la ducha es inadecuada para las mujeres, y no permite que sea expulsado por completo el líquido, lo que generará a largo plazo problemas en la vejiga e incontinencia.
En la mayoría de los casos, la orina es estéril, eso significa que no hay presencia de bacterias, pero si tienes síntomas de una infección urinaria o de riñón, habrá presencia de bacterias creciendo en la orina, lo que significa que si orinas en la ducha y tienes alguna herida, la misma podría infectarse, y además corres el riesgo de contraer hongos en los pies.
Orinar en la ducha trae consecuencias que a la larga podrían causar problemas de salud, y más cuando la compartimos con varias personas, nunca es tarde para adoptar nuevos hábitos.