- Cepillarse se ha convertido en una ardua tarea con los niños para que lo hagan, así también ocurre con el baño, la alimentación, no hacer la tarea, etc., pues naturalmente los niños se sienten más atraídos por las actividades de disfrute.
Lo primero que debemos hacer es informarles que desde que aparecen sus primeros dientes, que éstos deben cepillarse a diario para que siempre estén sanos y sin caries, luego ir creándoles una rutina de aseo bucal diaria.
Aquí te dejamos algunos consejos que puedes aplicar para forjar éste saludable hábito con los niños más pequeños:
- Cómprales una pasta de sabor más suave que la tuya, los niños pueden considerar que algunas son fuertes o desagradables, también intenta no aplicar pasta en todo el cepillo dental, no es necesario.
- Un cepillo divertido y adaptado a sus dientes, que sea de un cabezal pequeño, y cerdas blandas, deja que tu pequeño tenga la opción de elegir el suyo con su personaje preferido, así estará emocionado por utilizarlo.
- Sírvele de ejemplo, y háganlo juntos, establece las horas para cepillarse, donde intervengan el mayor número de habitantes de la casa, padres, abuelos y hermanos, así imitará la conducta.
- Canta canciones o colócale un vídeo sobre el tema para que puedan aprenderla y cantarla cada vez que llegue el momento. La hora del baño también puede resultar una buena opción para intentar cepillarse en la bañera junto a sus juguetes, etc., y así hacerlo más placentero.
- Sigue el método del 2×2, cepillarse durante al menos 2 minutos, 2 veces al día, y no te olvides de la lengua.
Cuanto más pequeño comencemos con la creación del hábito que deben cepillarse, más fácil será enseñarlos y que imiten lo que nosotros hacemos con nuestra propia higiene dental.
Con estos prácticos consejos, el momento de cepillarse será divertido y no una obligación.
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