Uno de los cuidados más importantes del hombre es el rasurado, por eso tendrás que hacer de este de este proceso un ritual placentero; no sólo el traje y la corbata son parte de una imagen impecable, tu rostro también es importante.
Para lograr un rasurado duradero y prevenir la irritación de la piel, las opciones abundan, por este motivo, te daremos algunos consejos, con todo lo que tienes que hacer antes, durante y después de rasurarte.
El mejor momento para el rasurado, es en la mañana, pues nuestro cuerpo ha descansado durante la noche y nuestros músculos están más relajados.
Mientras te preparas para el rasurado y la ducha, abre el agua caliente para generar vapor y así tus poros se vayan abriendo.
Hidrata tu piel dejando caer agua sobre ella durante tres minutos. (Esto puede ser mientras te duchas) seguido, exfolia tu rostro, esto permitirá que la piel muerta desaparezca y la hojilla se deslice con más facilidad.
Usa una capa gruesa de gel de afeitar, además de suavizar el vello, evitarás las cortaduras, irritaciones y marcarás la zona por donde pasa la afeitadora evitando que vuelvas a rasurar el mismo lugar.
– Usa agua tibia en la piel y al limpiar la afeitadora.
– Utiliza una máquina de afeitar con tres o más hojillas y asegúrate de que esté siempre afilado para evitar irritación y puntitos rojos, es importante que no lo compartas con nadie más por higiene.
– Reemplaza las afeitadoras regularmente, aunque aún están afiladas y rasuren bien, ya su tiempo de uso pasó.
– Hidrata la piel después del rasurado, no solo mejorarás su calidad, sino también evitas problemas relacionados con la barba, como las infecciones bacterianas, los salpullidos además de sentir una sensación agradable por su fragancia.
Logra un rasurado de película.